lunes, 30 de marzo de 2009

los jinetes de esqueleto
van galopando hasta la muralla de carbon
ya no confian en sus caballos negros
tan negros que se vuelven blancos

el soplo de los castillos de colores
quiebra las voces de todos los idiomas
y el silbido de la tormenta
acaricia a la nieve

arde la luna
y su reflejo en el agua se torna rojo
y los peces se defienden con escudos y espadas
de el perfume de las velas

los destellos del cielo
asustan a los ejercitos perdidos en el desierto
perdidos por buscar labios con olor a canela
y ojos con mirada caleidoscopica

todos las palabras se hacen humo
en los oidos de los titeres
y nadie los mueve de sus celdas
y nadie deja entrar a la noche pintada de verde

una risa tan triste como el mar
invoco a los sonidos del invierno
los guerreros abandonaron las torres de topacios
y el fuego beso a los esclavos de sus sueños

miércoles, 11 de marzo de 2009


encontre el interruptor de las estrellas tirado en el suelo
la luz intermitente del cielo se apago
ya nadie ampara a los nomades que viajan de mirada en mirada
y los reyes magos deveran comprar un mapa.

subo por una montaña sin sima y me encuentro contigo
mujer de vidrio: muestrame tus cofres con joyas
o almenos dame una ampolleta para no perderme en la noche

tengo al sistema solar enredado entre mis dedos
lo llevo con correa como si fuera un perro
y me cuelgo de los candelabros
hago acrobacias de aeroplano en aeroplano
porque jamas recordaron clavarme las manos a la cruz
y jamas lo recordaran
mientras esten viendo a los leones descuartizar gente en el coliseo

¿que tormenta me habra traidoa estas habitaciones invertidas?
¿en que barco habre navegado para llegar a un puerto con tu nombre?
donde tus labios se posan en todos los petalos
y yo los inflo con un bombin de plastico
se revientan y se multiplican

pareciera que los tigres blancos rugieran desde tus ojos fosilizados
la tierra se estremece con el diabolico canto de una golondrina
mis articulaciones rechinan como una puerta antigua
y respiro en tus manos petrificadas
mientras muero sofocado por un intenso sueño
el delirio me mastica por dentro
disparo al vacio con mi pistola de juguete
veo a las ciudades flotando en el eco de las olas
tu piel se derrite y yo nado por ella